Seguimos con esta mesa también del Palacio de Gaviria. Es una mesa muy robusta y de madera maciza. Como la decoración que ya tenía le quedaba muy bien decidí limpiarla, restaurar la madera de la tapa superior que estaba en mal estado y volver a pintar los apliques que iban en una imitación de bronce.
Ésta es una mesa con mucha personalidad, fuerte y crea un ambiente potente, poderoso, por ello para combinarla en nuestro hogar hay que buscar un sitio liviano, donde su personalidad se valore pero no recargue y ahogue el espacio. Aquí tenéis su antes y su después.
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| Mesa restaurada. |
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| El antes |
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| Detalle de los apliques de la mesa sin restaurar. |
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| Detalle de los apliques de la mesa restaurada. |
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| Pata de la mesa restaurada |
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| Mesa sin restaurar |
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